14 de Septiembre de 2023
Lampedusa, desbordada tras la llega de 10.000 migrantes en 72 horas
En lo que va de año han desembarcado en Italia 123.863 inmigrantes, casi el doble que los 65.517 del mismo periodo del 2022
La llegada de migrantes a Lampedusa (sur de Italia) se ha detenido bruscamente, con solo cuatro desembarcos registrados desde la medianoche y tras varios días de arribos masivos que han provocado el caos en el sistema de acogida de la isla y llevado al Ayuntamiento a decretar el estado de emergencia.
Después de que unas 7.000 personas saturaran este miércoles el centro de acogida, con capacidad para 400, las últimas horas han sido de tregua y ahora son 4.457 los migrantes presentes en esa estructura tras los últimos traslados a otras localidades italianas llevados a cabo por las autoridades, según los medios locales.
Ayer llegaron a Lampedusa 2.154 migrantes en 51 embarcaciones, que se sumaron al récord alcanzado el martes, con 5.112 en 110 barcos, y a los cerca de 2.800 que lo habían hecho el lunes, en 70 naves, creando una situación muy complicada de gestionar.
El Ayuntamiento de Lampedusa, situada frente a las costas africanas, proclamó en las ultimas horas el estado de emergencia para exigir ayuda al Gobierno nacional que preside la ultraderechista Giorgia Meloni, que llegó al poder prometiendo una mejor gestión migratoria, que, sin embargo, atraviesa un momento muy enrevesado.
"Hoy el Ayuntamiento ha declarado el estado de emergencia. Hemos reclamado lo que pedimos desde hace meses, que se trate de proteger la isla con naves rada, ayuda y apoyo para una isla que en estos meses ha estado en fuerte estrés", explicó a los medios el alcalde de la isla, Filippo Mannino.
La llegada de casi 10.000 personas en 72 horas provocó ayer grandes aglomeraciones de migrantes en el muelle de Favaloro, que tras largas horas de espera reclamaban alojamiento y que fueron contenidas por un cordón de agentes de la Guardia de Finanza (policía fronteriza italiana), entre forcejeos y momentos de tensión.
Esta pequeña isla, puerta de entrada a Europa desde África, sigue registrando un elevado flujo migratorio desde las costas de Túnez y Libia, acentuado por la crisis tunecina y unas condiciones meteorológicas más favorables en verano, entre otros factores.
Cuando los inmigrantes llegan a la isla normalmente son llevados a su único centro de acogida primaria, casi siempre en condiciones más que precarias y en situación de hacinamiento, por lo que las autoridades se afanan en acelerar los traslados.
A lo largo del día de hoy, unas 2.000 personas de las 4.457 que actualmente hay en el centro, 257 de ellas menores no acompañados, serán trasladadas a otras localidades sicilianas como Trapani, Porto Empedocle, Augusta y Catania.
Con las cifras en constante evolución, en lo que va de año han desembarcado en Italia 123.863 inmigrantes, casi el doble que los 65.517 del mismo periodo del 2022 y el triple que los de 2021 (41.286), según datos del Ministerio del Interior actualizados al 13 de septiembre. EFE