Fáusio Mussá, Economista del Banco Estándar para Angola y Mozambique

28 de noviembre de 2019

Standard Bank pronostica estabilidad macroeconómica a partir de 2020

Las reformas económicas en curso en el país permitirán un equilibrio macroeconómico en Angola a partir de 2020 a través de la estabilidad de la inflación y el intercambio, dijo en Luanda, el economista de Standard Bank para Angola y Mozambique, Fáusio Mussá.

En su opinión, los cambios regulatorios en el sector petrolero, la modificación de la Ley de Inversiones y el proceso de privatización, medidas implementadas por el Gobierno de Angola, atraerán más inversiones en Angola a partir de 2020.

Según el analista, que estaba hablando con la prensa en Brifing Economic, una iniciativa de Standard Bank, dijo que estas acciones permitirán que la economía angoleña reanude el crecimiento.

Angola tiene una nueva Ley de Inversión Privada, una nueva Ley de Competencia y otros instrumentos legales que establecen los principios y reglas para la protección de la actividad empresarial y evitan la competencia desleal entre los agentes económicos.

Fáusio Mussá agregó que la validez de estos instrumentos estructurales y legales demuestra el compromiso y la determinación del Gobierno de Angola de aumentar la apertura del país a la inversión privada extranjera sin burocracia.

El experto económico explicó que por el hecho de que Angola tenga un nivel muy alto de desempleo, debe haber un crecimiento económico acelerado para alcanzar los niveles de empleo deseados.

Predijo que a partir de 2020, las condiciones económicas podrían mejorar, aunque persisten los desafíos en términos de implementar una política de eliminación de subsidios y aumentar la flexibilidad del tipo de cambio.

Las relaciones que el país está desarrollando ayudan a mantener una buena relación con los inversores.

Con respecto a la economía mozambiqueña, explicó que está creciendo a un ritmo más lento en comparación con los últimos diez años, se espera que para 2020 la economía de Mozambique crezca un 3.7 por ciento, aún considerada baja, dado el potencial económico del país.