Ministra de Estado para el Área Social, Dra. Carolina Cerqueira

30 de noviembre de 2021

Discurso de la Ministra de Estado para el Área Social

Discurso de su excelencia Dra. Carolina Cerqueira - Ministra de Estado para el Área Social - 2ª Edición de la Bienal De Luanda (27 de noviembre de 2021).

Excelentísimo Señor Presidente de la República de Angola, João Manuel Gonçalves Lourenço, anfitrión de 2ª Edición de la Bienal de Luanda.

Excelencias Presidentes y Vicepresidentes;

La Ilustre Primera Dama de la República de Angola, Dra. Ana Dias Lourenço;

Altas Entidades del Estado de Angola;

Estimado sistema de las Naciones Unidas, Unión Africana, señoras y señores

Embajadores;

Todo Protocolo respetado;

Bienvenidos a todos a Luanda, capital de la República de Angola, tierra de exuberante belleza, con un pueblo heroico y generoso, una tierra de paz y hermandad, una tierra hospitalaria y orgullosa de aparecer en la lista de la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad.

Estamos hoy aquí para exaltar la paz en nuestros países, exaltar la paz en África y la exaltación de la Paz en todo el mundo.

Crear y consolidar lazos fraternos de amistad y solidaridad entre los países africanos, y entre estos y el resto del mundo, en el marco de una fuerte cultura de paz, es el objetivo que la Bienal de Paz pretende expandir y de Luanda, como capital de la paz.

Este evento que es, como sabemos, una iniciativa conjunta de las Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y Cultura (UNESCO), la Unión Africana (UA) y el Gobierno de Angola, como escenario privilegiado para la reflexión y difusión de obras artísticas, ideas y buenas prácticas relacionadas con la cultura de la paz.

Una cultura de paz se define como un conjunto de valores, actitudes y comportamientos que reflejan e inspiran la interacción social y el intercambio basado en los principios de libertad, justicia y democracia, respeto por los derechos humanos, la tolerancia y la solidaridad, que rechazan la violencia y se esfuerzan por prevenir conflictos, abordar sus causas para resolver problemas a través del diálogo y la negociación, que nos garantizan a todos, como ciudadanos, en pleno ejercicio de todos los derechos y medios para participar en el proceso de desarrollo de nuestras sociedades.

En este marco y con este supuesto, es con gran satisfacción que, en nuestro país, desde hoy y por segunda vez, reunimos a representantes de gobiernos, líderes africanos, sociedad civil, de la comunidad artística y científica, así como de organizaciones internacionales, jóvenes africanos y diáspora, con miras a promover la prevención de la violencia y la resolución de conflictos, para alentar el intercambio cultural en África y el diálogo entre generaciones.

Con una agenda basada en diversas actividades culturales y cívicas, pretendemos contribuir de manera decisiva, para la promoción y arraigo de una cultura de paz en el continente africano, para insertar África y el mundo en general en la dinámica de esta cultura.

La agenda para la paz permanece en la agenda de la política mundial, con especial atención a la diplomacia preventiva, gestión de crisis, mediación de conflictos, reconstrucción de sociedades afectadas por la violencia armada y, principalmente, el crecimiento de economías emergentes y países en proceso de desarrollo.

La diplomacia preventiva es, por tanto, fundamental para la deseada construcción de la Paz, la prevención no debe ser vista como una herramienta política, sino más bien como el camino hacia la Paz.

El desarrollo a través del diálogo y la cooperación es el único camino duradero hacia un futuro siendo la paz y la seguridad condiciones previas esenciales para el desarrollo y prosperidad.

En esta perspectiva, la educación debe asumirse como un vector estratégico tanto para combatir la pobreza como para combatir el analfabetismo, promover la salud y la igualdad de género, reducir las desigualdades, recuperación social, socioeconómica, preservación del medio ambiente, consolidación de la democracia y construcción de paz.

La paz no es, por tanto, un producto acabado. Es un producto en desarrollo, un activo precioso que se construye a través del diálogo, el conocimiento, la sabiduría y el respeto a los valores éticos y morales en los que se fundamentan relaciones de convivencia pacífica y tranquilidad espiritual.

Podemos considerarlo un sueño, pero creemos y confiamos en que nuestras generaciones futuras valores de solidaridad y generosidad.

Ninguno de nosotros estará a salvo si no lo estamos todos. La reciente crisis pandémica nos lo ha demostrado. Debemos ser conscientes de nuestra interconexión y responsabilidad hacia los demás.

Sólo juntos, hombres y mujeres, encontraremos la ansiada Paz. Sólo transformando y convirtiendo nuestro espacio africano en una cultura de cuidado, responsabilidad, armonía, confianza y escucha, construiremos la cultura de la paz.

La esperanza debe ser audaz. Necesitamos dejarnos abrir al mundo que nos rodea, porque está en la riqueza de nuestra diversidad y en la multiplicidad de voces e ideas que construiremos la Paz.

Debemos imaginar nuevos sistemas, considerar nuevas ideas, construir nuevos caminos y la única forma para que esto suceda es si abrimos nuestro corazón a la justicia, la dignidad, la solidaridad y el bien común.

La alianza de socios que lanzaremos en este evento representa el espíritu de solidaridad entre los estados en la búsqueda de soluciones conjuntas para la promoción, construcción y preservación de una cultura de paz entre la gente.

Concluyo Excelencias, señoras y señores, mostrando que estamos convencidos de que la paz será posible desde una ética global de solidaridad y cooperación al servicio de un futuro modelado por la interdependencia y corresponsabilidad en la familia, siendo imprescindible para ello involucrar a los jóvenes como futuros líderes, en actividades comunitarias que incluyan diferentes culturas y promover la comprensión global de la paz y el respeto por la diversidad.

Acogemos con beneplácito la asociación entre la UNESCO, la Unión Africana y el Gobierno de Angola que permitió la realización de esta gran celebración de la paz, que ha traído valiosos subsidios en la construcción y promoción de la Cultura de Paz en nuestros países.

¡Bienvenidos a Luanda, ciudad de paz y amistad entre los pueblos!

Muchas gracias