01 DE FEBRERO DE 2018

TRANSPARENCIA: El Gobierno de Angola auditará la deuda pública del país

El presidente de la bancada parlamentaria de UNITA, Adalberto da Costa Junior (en el centro)

El Gobierno de João Lourenço accionará todos los instrumentos legales que aseguren una gestión transparente de los fondos públicos, incluyendo las auditorías. Con esta decisión, da respuesta a la cuestión planteada por el grupo parlamentario de UNITA, que ha solicitado una auditoría a la deuda pública angoleña.

"En nombre del rigor y de la transparencia de la gestión pública, no nos oponemos a que se accionen todos los instrumentos legales que aseguren la concreción de este principio, incluyendo auditorías", subrayó el ministro de Estado de Desarrollo Económico, Manuel Nunes Júnior, ante las demandas de UNITA.

Desde el punto de vista del principal partido en la oposición, el grado de éxito o fracaso del actual Gobierno depende mucho de la gestión de la deuda pública, y una auditoría permitiría la reducción de ésta de forma significativa, haría su pago viable y no penalizaría a los contribuyentes.

Para UNITA, la deuda pública, sobre todo la de corto plazo (unos 20 millones de euros), es la principal fuente de inestabilidad macroeconómica del país y se ha manifestado a través de la reducción considerable de las reservas netas internacionales, la depreciación de la moneda (el kwanza), los altos niveles de inflación, el aumento de los tipos de interés, la disminución de la inversión privada y la continua dependencia del sector petrolero.

EL PAPEL DEL TRIBUNAL DE CUENTAS

El Ministerio de Finanzas de Angola ya tiene mecanismos de fiscalización de la deuda pública interna y, a través de esos instrumentos, se han podido detectar procesos que no se encuadran en los marcos de la ley, ante los cuales se está actuando.

A efectos de fiscalización externa, y en el marco de la separación de los poderes del Estado, Nunes recordó que "corresponde al Tribunal de Cuentas presentar un dictamen técnico sobre las cuentas generales del Estado cada año. Este dictamen tiene como una de las secciones el problema de la deuda pública", subrayó.

"En el marco de esta supervisión externa, el Tribunal de Cuentas puede hacer las averiguaciones y las auditorías que considere necesarias, incluida la propia deuda del Estado, para garantizar la solidez, la claridad, la objetividad y la profundidad de su opinión”, añadió.