03 DE FEBRERO DE 2016
Fondos europeos para diversificación de la economía
Los proyectos definidos en el 11º Fondo Europeo para el Desarrollo (FED), valorados en 210 millones de euros, deben tener un fuerte impacto a nivel del desarrollo sostenible, contribuyendo a la reducción de la pobreza y para la diversificación de la economía angoleña.
Según el representante de la Unión Europea en Angola, Gordon Kricke, en el acto de presentación del Plan Operativo de Acciones (POA) para el año en curso del Fondo de Apoyo Social (FAS), destacó que, en este momento, se están identificando y formulando proyectos de desarrollo para implementar en los próximos años. Recordó que en el 11º Fondo Europeo para el Desarrollo consta el programa de cooperación con Angola.
El programa de cooperación con Angola se aprobó en octubre de 2015 y tiene como principales sectores de intervención la agricultura sostenible, la formación profesional y enseñanza superior, así como el agua y el saneamiento.
La implementación de las acciones del proyecto de desarrollo local, van a contribuir a la promoción del desarrollo comunitario, mejorar el proceso de descentralización, participación activa de las poblaciones locales, mejora en el acceso a los servicios básicos de salud y de educación de las familias más necesitadas.
A União Europeia precisou, pretende, para este ano, continuar a acompanhar a execução das actividades do projecto de desenvolvimento local e fazer uma monitoria mais próxima, para se antecipar aos problemas e encontrar soluções que minimizem os atrasos e desvios relativos ao projecto inicial.
El programa, cuya fase piloto se inició a mediados del año pasado, pretende formar a 1.080 agentes en 18 municipios de las provincias de Bengo, Luanda, Lunda Norte, Malanje, Moxico y Uíge.
El Fondo de Apoyo Social va a aplicar este año más de 13 millones de euros para la construcción de infraestructuras en 14 provincias, así como la materialización de planes de desarrollo de 46 municipios del país.
El Proyecto de Desarrollo Local, tiene como meta combatir la pobreza, invirtiendo en las personas para una efectiva descentralización de la prestación de servicios públicos y para la mejora de las oportunidades económicas de las poblaciones más vulnerables.
