03 DE AGOSTO DE 2017
CAMBIO CLIMÁTICO: La recuperación de las zonas afectadas por la sequía cuesta más de 400 millones
Angola cifra en 408 millones de euros los costes de recuperación por los efectos la sequía prolongada que afectó, en los últimos cinco años, a más de un millón de personas en el país.
Los datos se desprenden de un informe sobre “La Sequía en Angola entre 2012-2016 y la evaluación de las necesidades post desastre”, elaborado por la Comisión Nacional de Protección Civil, con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Unión Europea y el Banco Mundial.
La sequía afectó sobre todo al sur del país, siendo las provincias de Cunene, Huila y Namibe, donde actualmente existen 1.139.064 personas, las más afectadas.
El informe divide en cuatro categorías las necesidades: reconstrucción de activos físicos, recuperación de la producción, funcionamiento de los servicios y acceso a bienes y servicios, restablecimiento de la gobernanza y de los procesos de toma de decisión y resolución de vulnerabilidades y riesgos.
Para paliar las consecuencias, se ha propuesto un presupuesto de 407,8 millones de euros que se repartirían entre los sectores agrícolas e hídricos, como los más necesitados, con 165,9 millones de euros y 85,1 millones de euros, respectivamente.
AGRICULTURA, GANADERÍA Y PESCA, LOS SECTORES MÁS AFECTADOS
Las necesidades de recuperación incluyen medidas a corto plazo (seis meses a un año), a medio plazo (uno a dos años) y a largo plazo (dos a cuatro años). A corto y medio plazo, el Gobierno señala medidas como la rehabilitación de la producción agrícola y ganadera, de las fuentes de agua para aumentar su disponibilidad de consumo humano y animal, el apoyo a los centros de nutrición, el fomento de los programas de salud, la alimentación escolar y la promoción de actividades alternativas de generación de ingresos.
El Gobierno estima que las pérdidas y daños para las tres provincias más afectadas por la sequía en Angola suponen más de 650 millones de euros. Los sectores de la agricultura, la ganadería y la pesca son de lejos los más afectados.
Al igual que gran parte del África Austral, Angola ha vivido una sequía desde la campaña agrícola de 2011/2012, marcada por una combinación de falta de lluvias, distribución irregular de la precipitación y períodos de sequía, que afectan sobre todo a la zona sur del país.