Angola celebra el 58º aniversario del Inicio de la Lucha Armada
Los angoleños celebran este lunes el 58º aniversario del inicio de la Lucha Armada de la Liberación Nacional. Los acontecimientos que se produjeron el 4 febrero de 1961 se traducen como una sublime expresión del nacionalismo angoleño.
Los ciudadanos recuerdan el acontecimiento que dio lugar al desmontaje del régimen portugués gracias a la lucha armada, que se prolongó por 15 años hasta la proclamación de la soberanía por el primer presidente, Antonio Agostinho Neto, el 11 de noviembre de 1975.
El 4 de febrero de 1961 es considerado un marco importante de la lucha africana contra el colonialismo, en una tradición de resistencia contra la ocupación que venía desde los pueblos de Kassanje, de Ndongo y del Planalto Central.
Con la celebración de este aniversario, los angoleños reiteran la firme disposición de continuar siendo fieles a los ideales del 4 de febrero, luchando por la reconstrucción del país y la reconciliación entre los angoleños. Además se intenta sensibilizar a la sociedad para que se comprometa en la consolidación de la paz, la reconciliación y reconstrucción nacional, así como fortalecer el sentimiento patriótico de los angoleños.
4 de febrero de 1961
Durante la madrugada del 4 de febrero de 1961, un grupo de mujeres y hombres, provistos de palos, catanas y machetes, atacaron la casa de recluidos y la prisión de São Paulo, en Luanda, para liberar a los presos políticos que estaban amenazados de muerte.
En respuesta al ataque, el régimen colonial-fascista reaccionó brutalmente con una acción de represión en todo el país, asesinando a varias personas indefensas y que provocó que algunos nacionalistas se organizasen para luchar por la liberación.
Los preparativos para ‘la liberación’ comenzaron en 1958, en Luanda, con la creación de dos grupos clandestinos: uno en la zona de los suburbios y otro para la zona urbana, coordinados por Paiva Domingos da Silva, Imperial Santana, Virgílio Sotto Mayor y Neves Bendinha.
Cambio nacional
Uno de estos grupos montó una emboscada a una patrulla de la Policía Militar, neutralizando a los cuatro soldados, tomándoles las armas y las municiones. Asaltaron la Casa de Reclusión Militar con el objetivo de liberar a los presos políticos pero no consiguieron.
Otros objetivos fueron la cárcel de la PIDE, en el Barrio de Santo Paulo, y la cárcel de la 7ª Escuadra de la Policía de Seguridad Pública (PSP), donde había también presos políticos. Intentaron también ocupar la Emisora Oficial de Angola, la radio al servicio de la propaganda del Estado.
En estas acciones, murieron cuarenta guerrilleros, seis agentes de la Policía y un cabo del Ejército Portugués, junto a la Casa de la Reclusión.
La valentía y la determinación de estos luchadores que, en la noche del 4 de Febrero de 1961 decidieron enfrentar al régimen colonial portugués, abrió el camino a la conquista de la independencia nacional.