05 DE FEBRERO DE 2015
El FMI propone el fin de las ayudas del Estado a la gasolina
El Fondo Monetario Internacional (FMI) sugiere la eliminación en 2015 de las ayudas del Estado a la gasolina y la reducción gradual, hasta 2020, de las subvenciones a los restantes combustibles.
La información consta en un informe del FMI, elaborado tras la visita de técnicos del organismo a Angola.
Los precios de la gasolina y del gasóleo en Angola se encuentran un 55 y un 67% por debajo de los precios medios del África subsahariana, según los datos citados en el informe, referentes a 2014, en el que se estima que el 10% del consumo se se hace mediante contrabando para los países vecinos.
Estas ayudas permiten mantener los precios artificialmente bajos y supusieron un 3,7% del Producto Interior Bruto (PIB) en 2014.
Entre varias propuestas, el plan de acción del FMI estabelece la eliminación, ya este año, de las ayudas a la gasolina. Tras dos aumentos en 2014, los primeiros en cuatro años, el litro de gasolina cuesta 0,75 euros, pero con la eliminación total de la ayuda pública subiría hasta 0,92 euros.
El FMI defende también un recorte de ayudas que provoque el aumento del litro del gasóleo de los actuales 0,50 euros hasta los 0,54 euros, ya este año. Se propone además un nuevo aumento para 2018 hasta los 0,75 euros y hasta un euro para el año siguiente.
Con estas medidas, incluidas en el ámbito de un plan para ejecutar hasta 2020, el FMI estima que el ahorro presupuestario neto resultante de la reforma podría llegar al 2% del PIB. “Esta cifra tiene en cuenta el consumo de combustibles por el Gobierno y la reducción de los subsidios, que eleva el gasto público con los combustibles utilizados por el sector público. Sin embargo, si los aumentos de los precios de los combustibles fueran integramente reflejados en las tarifas de electricidad, el ahorro podría llegar al 3,3% del PIB”, señala el informe.
A corto plazo, parte del ahorro presupuestario resultante de esta reforma podría ser usado para “ampliar y fortalecer los programas sociales existentes”, a través de un programa de “transferencias sociales”.
El consumo de derivados del petróleo se cuadruplicó en Angola desde 2005, hasta llegar a 119.000 barriles diarios en 2013. El gasóleo supone la mayor parte del consumo (63%), utilizado también para la producción de electricidad, seguido de la gasolina (15%) y el GPL (11%).
A pesar de que Angola es el segundo mayor productor de petróleo del África subsahariana, la mayoría de los produtos refinados son importados (82%).
