05 DE AGOSTO DE 2014
Medidas para salvar el BESA
El Banco Nacional de Angola (BNA) anunció el lunes, en Luanda, la adopción de medidas extraordinarias de saneamiento del Banco Espírito Santo (BESA) con el objetivo de reposicionar la sostenibilidad financiera y operacional del banco, armonizándolas con las normas vigentes para el ejercicio de la actividad comercial bancaria.
El gobernador del BNA, José de Lima Massano, aclaró que las “medidas no contemplan la intervención del Estado en el capital social del banco o el compromiso de cualquier fondo público”.
Al reaccionar de forma oficial a la degradación de la cartera de crédito del BESA, que afectó a los niveles de liquidez y de solvencia de la institución, José de Lima Massano dijo que la ejecución de las medidas extraordinarias va a asegurarse por administradores nombrados por el consejo de administración del Banco Nacional de Angola, durante un mandato de un año.
“A los nuevos administradores les compite vetar cualquier deliberación de la asamblea general, del consejo de administración o de cualquier otro órgano con funciones análogas, siempre que esté en juego la solvencia de la institución o la seguridad del sistema financiero”, dijo el gobernador del BNA.
Durante un año, la administración del BESA va a hacer una evaluación detalladas de la totalidad de la cartera de crédito de la institución y que parte del crédito va a incorporarse en los prejuicios. Va a efectuarse el estudio de elementos patrimoniales y serán objeto de alineación o reestructuración.
“El Banco Nacional de Angola reitera que, con esta intervención, no se alteran las relaciones de negocios del BESA con sus clientes. Está garantizada la seguridad de los depósitos en la institución financiera y el funcionamiento regular de la red de sucursales”, aseguró el gobernador del BNA.
José de Lima Massano dijo que el actual consejo de administración del BESA permanece en funciones, en articulación con los administradores, asumiendo la gestión corriente del banco.
En términos del os artículos 115º y 117º de la Ley de las Instituciones Financieras, José de Lima Massano aclaró que las medidas prevén ajustar las normas de prudencia tras la fase inicial de ejecución y es revocada la Garantía Soberana emitida por el Tesoro Nacional.
José de Lima Massano confirmó igualmente que el BNA ha venido a trabajar con el Banco de Portugal en un “camino que permita la seguridad e nuestros sistemas financieros”, asumiendo que esta solución permite asegurar, también, los derechos de los 1.050 trabajadores del BESA.
