07 DE JUNIO DE 2016
Producción de diamantes en Angola
El ministro de Geología y minas dijo que el sector prevé aumentar la producción de diamantes, hierro y piedras ornamentales. Las piedras ornamentales van a aumentar un 50% la producción en 2017. En cuanto a los diamantes, Francisco Queiroz dijo que va a entrar en funcionamiento en 2018, la mina de Luache, situada en Lunda Sul y que superará el actual proyecto de Catoca y que puede duplicar la producción actual de diamantes, que está en torno a los 9 millones de quilates al año, el precio de cerca de 1.200.000 de dólares.
Dentro de cinco años, explicó, esta producción se va a duplicar. “Se trata de una mina de gran dimensión. Podrá ser una de las más grandes, sin o es la más grande a cielo abierto en el mundo”.
Actualmente los diamantes tienen un peso del 2,5% en el PIB y un participación de 120.000.000 de dólares en impuestos para el Estado. “Con el descubrimiento de nuevas quimberlitas y la entrada en funcionamiento de la mina de Luache, la contribución del sector va a crecer en gran medida”, explicó.
El ministro habló de los grandes proyectos que se encuentran en desarrollo en el país. En relación al hierro, el proyecto minero y siderúrgico de Cassinga, que ya estuvo en funcionamiento en el periodo colonial y que el Titular del Poder Ejecutivo orientó para reactivar dentro de un nuevo modelo, debe comenzar en 2017 y estima la producción anual de un 1.700.000 toneladas de hierro y la creación de 800 empleos.
El proyecto de hierro ferro Gusa, en la localidad de Cutato que se encuentra en el municipio de Cuchi (provincia de Cuando Cubango), arrancará este año y debe producir 18.000 toneladas al año, pudiendo a partir de 2018, elevar la producción para las 90.000 toneladas. El proyecto costará 220 millones de dólares y generará 3.500 puestos de trabajo, ya que combina el componente silvícola con la minería.
El proyecto de fosfato en la provincia de Zaire, en la localidad de Lukunga, va a absorber 130 millones de dólares y generará 300 empleos. El montaje de la mina está previsto para 2017 y la producción de fertilizantes para 2018.
En Cabinda, en la localidad de Cácata, se encuentra el proyecto de fosfato que cuesta 114 millones de dólares y que creará 300 puestos de trabajo. Arrancará el año que viene con el montaje de la mina y en 2018 con la producción de fertilizantes.
En la provincia de Cuanza Norte en la localidad de Cerca, se encuentra otro proyecto de hierro, valorado en 290 millones de dólares, generando 100 puestos de trabajo y comenzará a funcionar en 2018.
En lo que se refiere a la inversión privada en el sector, el ministro consideró que existe un buen marco regulatorio que está dominado por el Código Minero. Basándose en las reglas, el sector se organiza para captar inversiones. “Nuestro objetivo es estar listos para recibir inversores con gran capacidad financiera y técnica y a la altura de las grandes oportunidades de inversión que se están creando en el país”.
Destacó que el sector privado tiene garantías de acceso a la actividad minera sin restricciones, explicando que esta tienen lugar con la explotación de los minerales menos nobles, como las piedras ornamentales y las que se utilizan para la construcción, que incluyen al sector privado extranjero, que solo puede entrar con hasta un tercio del capital social de la sociedad que realiza dicha explotación. Dos tercios se reservan al sector privado nacional.
Francisco Queiroz explicó que existe un modelo de explotación con el que el Estado define la forma de organizar y explotar, apropiándose de los recursos a través de las concesionarias nacionales (Sonangol en petróleo, Endiama en diamantes y Ferrangol en oro).
A pesar de ello, reconoció que aún falta la capacidad de transformación de los recursos naturales minerales para agregar plusvalías. El ministro dijo que todo el trabajo que está realizando el sector pretende conducir a la creación de los polos de desarrollo minero en el país.