13 DE OCTUBRE DE 2016
ECONOMÍA: Buenas perspectivas a medio plazo
Las últimas previsiones de los economistas del Fondo Monetario Internacional (FMI) afirman que Angola registrará un crecimiento de un tercio de media de lo que se creció entre 1998 y 2007 (un 10,3% anual) en los próximos cinco años.
El FMI revisó su pronóstico de crecimiento del país, que registra un estancamiento este año, pero que aumentará un 1,5% en 2017.
Estas conclusiones se han hecho públicas en el informe “Panorama Económico Mundial” (World Economic Outlook), que se dio a conocer en Washington.
"Angola está, como Nigeria y Sudáfrica, adaptándose a la fuerte caída de los ingresos procedentes de las exportaciones de petróleo. No debería crecer este año, pero sí va a registrar un pequeño crecimiento en 2017", asegura el informe.
DIFERENCIA DE OPINIONES
Las previsiones de crecimiento actualizadas se han hecho públicas un mes después de que el Economist Intelligence Unit revisara a la baja el crecimiento de Angola para este año.
En agosto, Angola revisó a la baja su previsión de crecimiento para el 2016 por segunda vez en poco más de un mes: desde el 3,3% que se preveía a principios de año, pasó al 1,3% en julio, y al 1,1% un mes después.
En el informe sobre Angola enviado hace dos semanas a los inversores, el Economist Intelligence Unit prevé que en los próximos el país acelere el crecimiento económico hasta alcanzar un 3,5% en 2018, para pasar a una desaceleración económica en 2020 que situará este índice en un 2,5%.
PRESUPUESTOS GENERALES DEL ESTADO
Debido a la caída de los precios del petróleo, que se ha mantenido en el primer semestre, el Gobierno angoleño presentó en el Parlamento una propuesta de revisión de los Presupuestos Generales del Estado (OGE) 2016.
La previsión del precio medio del barril de crudo pasó de los 45 dólares, a los 41. Y en base a esta estimación, se hizo la revisión del OGE.
En los cálculos del Ejecutivo, también se contempló que el crecimiento de la economía del país pasase del 3,3% inicial, al 1,1% que se estima ahora. Además, la inflación derivada de la crisis de la moneda se ha disparado del 11 % al 38,5%.