18 DE ENERO DE 2018
RECURSOS NATURALES: Los bosques ocupan casi el 56% de la superficie de Angola
Angola posee una superficie forestal evaluada en 69,3 millones de hectáreas, que representan el 55,6% de su superficie territorial, y las reservas de madera comercial están estimadas en 4.500 millones de metros cúbicos.
El país presenta una capacidad de corte permisible de su bosque natural, en la actual fase, de 500.000 metros cúbicos de madera anualmente, sin que este volumen ponga en riesgo la sostenibilidad de sus bosques. Además, hay un incremento natural, derivado de la capacidad de auto-renovación, estimado en 0,11 metros cúbicos anuales por hectárea, en los diferentes ecosistemas forestales del país, totalizando un crecimiento global del bosque de 7.590.000 metros cúbicos.
Además de los bosques naturales, Angola cuenta con un potencial de bosques plantados, constituidos por eucaliptos, pinos y otras especies exóticas, que ocupan una superficie de 148.000 hectáreas, ubicadas sobre todo en la meseta central, en las zonas de convergencia entre las provincias de Benguela, Huambo, Bié y Huila, con una capacidad de oferta estimada en 850.000 metros cúbicos por año.
Los datos han sido facilitados por el secretario de Estado del Ministerio de Comercio angoleño, Amadeu Nunes, en una conferencia de prensa que ofreció en Luanda para hablar sobre la explotación de los bosques nacionales.
UNA INDUSTRIA SOSTENIBLE
Las exportaciones angoleñas de madera han superado las 60.000 toneladas durante el primer semestre del año pasado, con un valor cercano a los 18 millones de euros, y su principal destino fueron los países asiáticos, especialmente China y Vietnam.
En 2016, Angola exportó 221.000 toneladas de madera, obteniendo unos 30 millones de euros. De estas, 107.000 fueron compradas por China; 35.000 por Vietnam; 26.000 toneladas se vendieron a Portugal; 24.000 a Turquía; unas 8.000 a Emiratos Árabes Unidos; 7.000 toneladas a la India; Estados Unidos compró unas 4.000 y el Líbano otras 2.000 toneladas.
En la campaña forestal de 2018, que comenzará en mayo, se lanzará un nuevo modelo de concesión de licencias, basado en contratos de explotación forestal, para dar mayor seguridad jurídica, confianza a los agentes económicos y control y fiscalización de los recursos forestales y reducir el número de empresas participantes en el proceso de explotación forestal.