24 DE OCTUBRE DE 2017
Angola, balance de cuatro años al frente de la CIRGL
El papel de Angola al frente de la Conferencia Internacional para la Región de los Grandes Lagos (CIRGL) ha sido elogiado en la última cumbre de jefes de Estado, celebrada en Brazzaville (República del Congo). Allí se ha rendido un homenaje al ya ex presidente José Eduardo dos Santos, y se ha dado la bienvenida a su sucesor, João Lourenço, a quien han felicitado por la transición política, pacífica y ejemplar, que se ha llevado a cabo en Angola.
"Todos nosotros, aquí presentes, quisiéramos expresar nuestra más profunda gratitud", declaró el Presidente anfitrión, Denis Sassou Nguesso, refiriéndose al trabajo de Angola a favor de la CIRGL, y al empeño de sus autoridades durante los cuatro años que han estado al frente de la organización.
En su primera participación como Presidente de la República en una cumbre de la CIRGL, João Lourenço ha hecho balance de los dos mandatos consecutivos de Angola al frente de la organización, y ha prometido apoyo a la nueva presidencia que luchará por el desarrollo de la región. Lourenço seguirá trabajando con la Secretaría de la CIRGL, como Estado miembro de pleno derecho y también miembro de la troika, de la que es vicepresidente, y que está integrada por la República del Congo y Uganda.
Denis Sassou Nguesso, que va a liderar la organización en los próximos dos años, asegura que va a dar continuidad al trabajo de Angola para la estabilidad en la región y para que la población aproveche todas las ventajas que ofrece la CIRGL, a modo de plataforma económica y social para los Estados miembros.
ASISTENCIA A LA POBLACIÓN
João Lourenço ha pedido a sus homólogos que continúen luchando por la mejora de las condiciones sociales de las poblaciones, subrayando que la lucha debe llevar a compromisos, como organización regional, que pasan por encontrar soluciones duraderas para garantizar la protección y asistencia a las poblaciones afectadas por conflictos políticos, catástrofes humanitarias, sociales y medioambientales en la Región de los Grandes Lagos.
El Presidente de Angola ha recordado que una de las metas de la organización es el desarrollo económico y la prosperidad de las poblaciones, según lo expresado en el Pacto sobre Seguridad, Estabilidad y Desarrollo en la Región de los Grandes Lagos, firmado por los entonces 11 Jefes de Estado y de Gobierno de los países miembros de la CIRGL, el 15 de diciembre de 2006, en Nairobi, Kenia.
El pacto tiene como objetivo transformar la región de los Grandes Lagos en un destino común, en un espacio de paz y seguridad duraderas, como una zona específica de reconstrucción y desarrollo, con plena participación de los pueblos, buscando conjuntamente soluciones pacíficas a los conflictos.
A lo largo de los años, la diplomacia actuante e inclusiva ejercida por Angola para superar las diversas situaciones de conflicto se ha implementado en lugares como la República Democrática del Congo (RDC), la República Centroafricana (RCA), Burundi y Sudán del Sur.
En la República Centroafricana ha sido posible hacer una transición política ejemplar, gracias al liderazgo moderador de Catherine Samba-Panza, que culminó con la elección de Faustin Touadéra como Jefe de Estado.
SITUACIÓN EN LA REPÚBLICA DEMOCRÁTICA DEL CONGO
“En la RDC se ha hecho un gran trabajo para poner fin a la presencia de fuerzas negativas que fomentaban el caos en el este del país, apoyando a las Fuerzas Democráticas de Liberación de Ruanda (FDLR) y a desmantelar las milicias congoleñas M-23”, apuntó Lourenço.
A pesar de que la situación aún no está normalizada en RDC, el Presidente de Angola ha aclarado que se han registrado "progresos sustanciales" que han permitido el establecimiento de un diálogo nacional entre el Gobierno, los partidos de la oposición y otras fuerzas de la sociedad civil, para crear "un clima propicio para la celebración de elecciones a su debido tiempo”.
Durante estos últimos cuatro años, Angola se ha esforzado por acoger, superando incluso sus posibilidades derivadas de la crisis económica e internacional, a miles de refugiados congoleños huidos de una guerra innecesaria y cruel. Un hecho que ha merecido el reconocimiento de las instancias internacionales.