25 DE OCTUBRE DE 2016
Mañana comienza la Cumbre para evaluar la situación de la República del Congo
La capital de Angola, Luanda, acogerá la séptima reunión a nivel de Jefes de Estado del Mecanismo Regional de Supervisión de Paz, Seguridad y Cooperación para la RDC y la región de los Grandes Lagos.
El encuentro es una iniciativa de Angola, que preside la Conferencia Internacional para la Región de los Grandes Lagos (CIRGL), en cooperación con la Unión Africana (UA), la Comunidad para el Desarrollo (SADC) y las Naciones Unidas.
Con esta cumbre se pretende evaluar la situación actual en la RDC, y prevenir el empeoramiento de la situación política que ha causado un centenar de muertos.
Se hará balance de la aplicación del Acuerdo Marco para la Paz, la Seguridad y la Cooperación en República Democrática del Congo, y el cumplimiento de los compromisos nacionales, regionales e internacionales. Los líderes también deberán tener en cuenta la neutralización de las fuerzas negativas y la repatriación de combatientes desarmados en la RDC.
Durante el encuentro también se va a analizar la evolución de la República de Burundi, la República Centroafricana y Sudán del Sur.
EL ACUERDO DE ADDIS ABEBA
Este Acuerdo Marco se firmó el 24 de febrero de 2013 en Addis Abeba (Etiopía) y establece una serie de obligaciones para el Gobierno de la República Democrática del Congo, los países de la región y la comunidad internacional.
Prevé la reforma del sector de la seguridad y la administración pública, la consolidación de la autoridad del Estado, promover la descentralización, el desarrollo económico, la reconciliación nacional, la expansión de la infraestructura y la organización de elecciones.
Según el documento, los países de la región deben abstenerse de ayudar o dar refugio a los grupos armados, para que respeten la integridad y la soberanía de los países vecinos. De esta manera se fortalece la cooperación regional.
La comunidad internacional, por su parte, debe apoyar la aplicación del pacto de seguridad y estabilidad en los Grandes Lagos.
ANGOLA EXIGE SOLUCIONES NEGOCIADAS PARA PONER FIN A LA CRISIS
La Cumbre comenzó a prepararse el lunes, en Luanda, donde se reunieron los ministros de Asuntos Exteriores de los países que integran la CIRGL.
Angola, por su parte, dejó claro en estas sesiones previas que apuesta por soluciones pacíficas, políticas y negociaciones para que la República Democrática del Congo salga de la crisis.
El Ministro de Asuntos Exteriores, Georges Chikoti, dijo que su Gobierno condena los actos de violencia que tuvieron lugar a finales de septiembre en Kinshasa, y pidió a todos los actores políticos y a la sociedad civil preservar los logros significativos realizados hasta el momento.
Chikoti subrayó que Angola está cada vez más comprometida con los procesos de paz en la República Democrática del Congo, Burundi, República Centroafricana y Sudán del Sur.
Además, recordó que el acuerdo político para la organización de elecciones pacíficas, creíbles y transparentes en la RDC, firmado este mes, está abierto a la firma de otros partidos y bloques políticos del país, así como otras organizaciones de la sociedad civil. La intención, dijo, es asegurar la solución pacífica de los conflictos políticos en un espíritu de compromiso con la paz y la estabilidad en el servicio de interés nacional.
REPÚBLICA CENTROAFRICANA APUESTA POR EL DESARME
Chikoti reconoció los esfuerzos en curso para contener la creciente amenaza de las Fuerzas Democráticas Aliadas y otras fuerzas negativas del Congo, pero recordó que no es el único país que preocupa.
La situación política y de seguridad en Burundi requiere urgentemente de un diálogo inclusivo, para mantener una paz que sigue siendo indispensable para superar la crisis post-electoral.
Acerca de República Centroafricana, el jefe de la diplomacia angoleña explicó que la situación sigue siendo frágil, pero dio la bienvenida a los esfuerzos del gobierno para promover el diálogo y la reconciliación con la puesta en marcha del Programa Nacional de Desarme, Desmovilización, Repatriación y Reintegración y consolidar la autoridad del Estado en todo el país.
La situación en el sur de Sudán también está en la agenda de la Cumbre. Sólo un cese inmediato de las hostilidades, y el respeto de los compromisos asumidos en el Acuerdo sobre la resolución del conflicto, puede garantizar la paz y la estabilidad. Para ello, apuntó el Ministro de Exteriores angoleño “necesitamos el apoyo y la contribución de todo el proceso de diálogo y la reconciliación entre las comunidades en el sur de Sudán y la restauración del clima de confianza necesario para el desarrollo”.
Angola preside actualmente la Conferencia Internacional para la Región de los Grandes Lagos (CIRGL), y está más implicada que nunca en el proceso de estabilización de la zona.