26 DE SEPTIEMBRE DE 2016
Angola aboga por la ampliación del Consejo de Seguridad
El vicepresidente de la República, Manuel Vicente, ha afirmado en la Asamblea General de las Naciones Unidas que la reforma del Consejo de Seguridad es "un imperativo, que de no llevarse a cabo puede conducir a la incapacidad de acción de la ONU y al desmoronamiento de su legitimidad y credibilidad".
Durante la 71ª Reunión de la Asamblea, y en representación del Jefe de Estado, José Eduardo dos Santos, Vicente declaró que Angola está a favor de ampliar el número de miembros permanentes y no permanentes del Consejo de Seguridad, para que sea un órgano más representativo y mejor equipado en su capacidad de respuesta en la resolución de conflictos.
Por esta razón, precisó, Angola reitera el derecho del continente africano de estar representado entre los miembros permanentes del Consejo de Seguridad, conforme con los principios recogidos en el Consenso de Ezulwini.
En cuanto a la organización en general, el vicepresidente dijo que las Naciones Unidas deben ser capaces de promover la paz y la seguridad internacionales. Para ello, es necesario tener la capacidad para actuar con rapidez y eficacia en situaciones de conflicto, y hacer frente a los retos más urgentes de la actualidad: el terrorismo internacional sin precedentes o el preocupante cambio climático.
"Estos cambios requieren, por supuesto, una reflexión conjunta sobre el papel y el futuro de las Naciones Unidas", añadió, subrayando el papel de la Asamblea General para encontrar soluciones a los problemas internacionales más acuciantes. La preservación de la paz, el fortalecimiento de la seguridad colectiva y la renuncia al uso de la fuerza en las relaciones internacionales, el respeto a la soberanía de los estados, la defensa y promoción de los derechos humanos y la reafirmación del Estado de Derecho como principios fundamentales del sistema internacional.
De acuerdo con el vicepresidente de la República, Angola cree que el espíritu de apertura al diálogo, la tolerancia y la prevalencia de sentido común es la clave para resolver los problemas que afectan actualmente a la humanidad.
EL PAPEL DE ANGOLA EN LA REGIÓN DE LOS GRANDES LAGOS
Manuel Vicente explicó que Angola, en calidad de presidente de la Conferencia Internacional de los Grandes Lagos, se ha dedicado a la búsqueda de soluciones a los problemas que afectan a la región en el marco bilateral y multilateral, así como en el Consejo de la Seguridad de las Naciones Unidas y en el Consejo de Paz y Seguridad de la Unión Africana. "Reafirmamos nuestra determinación de seguir promoviendo el diálogo, la paz, la seguridad y la estabilidad en África Central y en toda la región de los Grandes Lagos", matizó.
Para el vicepresidente de la República, las Naciones Unidas y la Unión Africana deben prestar especial atención a la crisis en Libia, Malí, República Centroafricana, la República Democrática del Congo, Sudán, Sudán del Sur, Somalia y Burundi.
Manuel Vicente también sostuvo que los conflictos de Libia, Siria e Irak requieren una resolución rápida. “Las graves consecuencias humanitarias necesitan una respuesta inmediata y efectiva por parte de la comunidad internacional”.
El proceso de distensión entre Cuba y los EE.UU. también es un tema que preocupa a Angola, ya que, a pesar de la reanudación de las relaciones diplomáticas entre los dos países, aún no se ha producido el levantamiento del bloqueo económico.
DESARROLLO SOSTENIBLE Y CAMBIO CLIMÁTICO
En su intervención en la Asamblea de la ONU, el vicepresidente también habló de los objetivos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030, y aseguró que Angola está firmemente comprometida con su implementación. A través de medidas adecuadas a nivel nacional, Angola trabaja para el beneficio del planeta, su prosperidad, la estabilidad y la paz. "Es nuestra intención de ratificar en el menor tiempo posible el Acuerdo de París" dijo.
El cambio climático, explicó, es uno de los problemas más complejos y urgentes a los que se enfrenta el mundo hoy en día. Su impacto en la migración, la seguridad alimentaria, los recursos naturales, la propagación de epidemias e incluso en la inestabilidad social y económica es una realidad, y requiere respuestas por parte de la comunidad internacional.
El Acuerdo de París 2015, subrayó Manuel Vicente, es un valioso instrumento de acción, ambicioso, equilibrado y justo, cuya entrada en vigor animará a los esfuerzos colectivos para controlar el calentamiento global.
El vicepresidente indicó que Angola sólo representa el 0,17% de las emisiones de gases de efecto invernadero, y sin embargo, siente los efectos del cambio climático en los ciclos de sequías y precipitaciones intensas, que suponen una amenaza para la agricultura, la infraestructura económica y social del país.
Manuel Vicente confirmó la participación de Angola en la Tercera Conferencia de las Naciones Unidas sobre Alojamiento y el Desarrollo Urbano Sostenible (Hábitat III), que se celebrará el próximo mes en Quito.
Para Angola, se trata de una oportunidad para adoptar una nueva agenda urbana global, y probablemente para promover relaciones y sinergias entre la urbanización, el desarrollo sostenible y el cambio climático.
La Asamblea General fue informada de que Angola es un país estable desde el punto de vista político y social. Económicamente, Manuel Vicente explicó que los retos que afronta son mayores, debido a la incertidumbre con los precios de las materias primas en el mercado internacional. "Pero seguimos trabajando para ajustar nuestros planes de acción, y para encontrar mejores formas de crecimiento económico que mejoren la vida de nuestro pueblo", concluyó.