28 DE NOVIEMBRE DE 2017
Más de dos décadas de cooperación entre las dos mayores potencias de África Austral
Angola y Sudáfrica mantienen relaciones político-diplomáticas y económicas desde 1994, tras la caída del Apartheid, que culminó con la elección de Nelson Mandela como presidente sudafricano en las primeras elecciones democráticas multirraciales.
Ambos países iniciaron entonces una nueva era de cooperación económica, con la creación de una asociación estratégica en agosto de 2009, cuando el Presidente José Eduardo dos Santos y Jacob Zuma firmaron en Luanda los primeros acuerdos de servicios en varias áreas (incluida la diplomática), así como los memorandos sobre la transacción, la industria, el comercio, la vivienda, el deporte y el recreo.
Un año más tarde, entre los días 13 y 15 de diciembre de 2010, los dos países rubricaron cinco acuerdos para el aumento de la cooperación en las obras públicas y el desarrollo de infraestructuras, telecomunicaciones y tecnologías de información y declaración de intenciones sobre la aplicación de facilidades financieras.
En aquel momento, la firma de estos instrumentos indicaba la determinación de los dos Estados miembros de la SADC de llevar las relaciones existentes al más alto nivel, para el beneficio mutuo de los pueblos.
OPORTUNIDADES DE TRABAJO
Desde entonces, representantes angoleños y sudafricanos han trabajado en varios campos, con el objetivo de fortalecer la cooperación económica bilateral. Áreas como energía, agricultura, minas, artes y cultura, desarrollo de infraestructuras, comunicaciones, educación, salud, deporte y transporte han sido las más visibles.
Otra atención especial ha sido dirigida para el comercio y la inversión, con la creación de oportunidades de trabajo. En este marco, destacan la realización del Foro de Negocios Sudáfrica-Angola, que se encargó de ayudar a identificar áreas adicionales de cooperación para el comercio.
Angola y Sudáfrica son las mayores economías y potencias militares en la Comunidad de Desarrollo del África Austral (SADC). Por eso, tienen sobre sí la responsabilidad de la integración económica, la preservación de la paz, la seguridad y la estabilidad en la región.
Los dos países tienen como instrumento jurídico de trabajo un Acuerdo General de Cooperación Económica, Científica y Técnico-cultural, firmado en abril de 1998, y el Acuerdo para el Establecimiento de la Comisión de Cooperación Bilateral, rubricado en noviembre de 2000. Entre 2003 y 2007, analizaron la cooperación institucional en dos ocasiones, a nivel de la Comisión Mixta Bilateral.
BALANCE DE RESULTADOS
Esta Comisión de Cooperación Bilateral se reunió en Luanda, en julio de este año, para hacer balance del cumplimiento de los acuerdos y memorandos firmados en la reunión anterior (octubre de 2013). En ese momento, se estudiaron los mecanismos de mejor aplicación de los instrumentos jurídicos, con el fin de impulsar más las relaciones bilaterales y de cooperación estratégica.
En julio pasado, expertos de los dos países debatieron asuntos relacionados con las ramas de petróleo, la agricultura, la pesca, la hostelería y el turismo, el medio ambiente, el transporte, las finanzas, las telecomunicaciones y las tecnologías de la información. También se discutieron cuestiones relacionadas con la familia, la promoción de la mujer, asistencia y reinserción social, cultura, comunicación social, educación superior, educación, juventud y deportes, ciencia y tecnología.