29 DE SEPTIEMBRE DE 2016

SEQUÍA EN ANGOLA: Grandes pérdidas en el sur del país

Formación del fenómeno meteorológico "El Niño"

La sequía que afecta al sur de Angola desde 2014 ha provocado pérdidas de 670 millones de euros, equivalentes a 0,7% del PIB del país, de acuerdo con una evaluación conjunta del Gobierno y la ONU.

Según el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la situación afecta principalmente a las provincias de Huila, Cunene y Namibia, y en los últimos seis meses ha sido necesario ejecutar proyectos de emergencia para hacer frente a los efectos climáticos de "El Niño".

Una "evaluación de necesidades", que han realizado varias organizaciones de la ONU que trabajan en Angola, junto con el Gobierno, revela que se han producido pérdidas de 403 millones de euros (en equipos dañados) y alrededor de otros 264 millones de euros por el "impacto de las sequías" entre 2014 y 2016.

El PNUD explica que, a lo largo de 2016, en la región sur el 40% de la producción agrícola se ha perdido debido a la falta de lluvias prolongadas.

En total, unos 670 millones de euros, correspondientes a más de 0,7% del Producto Interno Bruto.

SEMINARIO EN HUILA

La persistente sequía en el sur de Angola ha sido también el tema de un seminario en el que han participado los gobiernos de las tres provincias más afectadas, el Gobierno central, organizaciones internacionales y agencias de la ONU, y que se ha celebrado en Lubango, capital de la provincia de Huila.

En el encuentro se han expuesto las acciones que se están llevando a cabo para minimizar los efectos de la prolongada sequía en esta zona del país. Un conjunto de medidas que han puesto en marcha agencias de la ONU, con fondos de emergencia, que ya ascienden a siete millones de dólares en los últimos seis meses.

De acuerdo con cifras dadas a conocer por el coordinador residente del Sistema de Naciones Unidas en Angola, Pier Paolo Balladelli, más de 2.900 familias han mejorado su capacidad técnica de producción agrícola, y se ha reforzado la salud animal de 5.000 explotaciones familiares para paliar los efectos de la sequía.

"Más de 9.800 niños con desnutrición aguda fueron tratados mediante la distribución de suplementos terapéuticos, 590 técnicos de salud han sido capacitados y otros 220 trabajadores de la comunidad aprendieron a identificar a los niños en riesgo", dijo Balladelli.

Además, matizó, 14.000 personas obtuvieron acceso al agua potable a través de bombas de mano rehabilitadas; 40.000 personas viven en comunidades con letrinas y casi 71.000 recibieron productos para el cuidado personal. También se capacitó a 10.300 jóvenes en temas de salud e higiene reproductiva, y se repartieron 2.400 kits con artículos de higiene personal.

Pier Paolo Balladelli destacó que el proyecto de la cuenca hidrográfica del río Cuvelai, que ha desarrollado el Ministerio de Medio Ambiente, es un buen ejemplo de cómo combatir la sequía. Y recomendó la elaboración de un plan nacional para "aumentar la resistencia de la población en el Sur", en particular con iniciativas de microcrédito.

En el ámbito de la agricultura y la ganadería, "con los planes de tipo macroeconómicos de políticas contracíclicas se pueden mejorar las redes de seguridad social", concluyó.