Angola quiere competir en igualdad de condiciones con el resto de países africanos que, sin petróleo, tienen en el turismo una de las principales actividades generadoras de empleo e ingresos para las arcas públicas.
Por eso se están haciendo inversiones para ampliar la red de hoteles, a la vez que se adoptan medidas para reducir precios y mejorar la calidad del servicio.
En este orden de ideas, el país ha actualizado recientemente gran parte de la legislación que regula el sector, con el objetivo final de "hacer la vida más fácil" a los operadores del mercado y a los destinatarios de los servicios.
En 2002, tras proclamarse la paz, el país entró en la ruta de los principales destinos turísticos de África, lo que llevó a la modernización y expansión de la red hotelera del país y a la actualización de toda la legislación del sector.
A través de decretos, El Ejecutivo ha actualizado el marco legal para facilitar la instalación y explotación de infraestructuras turísticas, complejos de restauración y agencias de viajes y turismo. La finalidad es modernizar el sector, crear nuevos puestos de trabajo y obtener más ingresos para el Estado.
Las ventajas que la nueva legislación ofrece a los operadores y usuarios de los servicios del hotel, se unen a otras variables como la belleza natural de las distintas regiones de Angola y una cadena hotelera moderna.
También se han realizado inversiones públicas en el sector, que junto a las que se hacen en otros campos como la energía, el agua, carreteras y telecomunicaciones, impulsan el potencial turístico del país.
El Gobierno de Angola espera que, a medio plazo, en 2020, la industria del turismo contribuya con el 3% en el Producto Interior Bruto (PIB), equivalente a 4.000 millones de dólares. En la actualidad, el sector sólo representa un 0,34%.
Con 187 hoteles y 1.200 establecimientos similares, Angola pone a disposición del visitante 24.390 habitaciones (con un total de 32.844 camas).
El país cuenta en la actualidad con más de 4.000 restaurantes, 200 agencias de viajes y otras 200 de alquiler de coches, que completan la oferta logística.
En 2015, el país fue destino para 592.500 turistas, cuyo gasto revirtió en un 10% sobre la factura para el Presupuesto General del Estado.
Y no hay que olvidar que el sector da trabajo a unas 220.000 personas.
En abril, la Comisión Económica del Consejo de Ministros aprobó el Plan Operativo para el Turismo 2016/2017, de acuerdo con el Plan Director 2011/2020 y el Plan Estratégico de Desarrollo para el año 2025.
El plan incluye, entre otros, una mayor difusión del potencial turístico del país en los principales mercados turísticos, enriqueciendo la oferta de servicios turísticos y la mejora de la calidad urbana y ambiental.
eligieron Angola como destino
Para evaluar los beneficios del turismo en la economía nacional, el Ministerio de Hostelería y Turismo tiene como objetivo la creación de una cuenta satélite nacional, en consonancia con las recomendaciones de la Organización Mundial del Turismo (OMT).
El plan también prevé un aumento de eventos turísticos, la construcción de escuelas de hostelería en todas las provincias del país, la creación de puntos de información turística, un punto de venta de licencias hosteleras, restaurantes y agencias de viajes. Se estima que, dentro de los siete años, Angola atraerá a más de cuatro millones de turistas anualmente, y creará un millón de puestos de trabajo.
El ministro de Hostelería y Turismo, Paulino Baptista, admite que esta meta podría alcanzarse mucho antes, dado que el país está comenzando a recibir a los turistas de los cruceros internacionales.
Ya existen dos casos recientes de cruceros internacionales en aguas de Angola, que atracaron en Namibe y Luanda. En el caso de Luanda, dentro de los dos años, la capital se convertirá en parte de la lista mundial de ciudades entrantes y salientes de pasajeros de cruceros. Actualmente, y desde 2012, es sólo ciudad de paso.
Para reducir el coste de los servicios hoteleros, el Gobierno ha invertido en la mejora de la producción nacional, las carreteras, los sistemas de suministro de energía y agua potable, y la formación de personal para el sector.
Se espera que los proyectos estructurales en el sector de la energía, como Lauca, Cambambe II y la Central de Ciclo Combinado de Soyo, así como la recuperación de la red vial, tendrán también un impacto significativo sobre los precios.
Ligada a la calidad del servicio, la cualificación de las personas que trabajan en el sector es un punto muy importante. De un tiempo a esta parte, es notable aumento de la oferta de cursos profesionales y académicos con salida profesional en el sector de la hostelería y el turismo, que, por otra parte, está muy bien pagado.
Como una industria generadora de puestos de trabajo, el sector hotelero y el turismo tienen un papel importante en el plan nacional de formación del personal. En esta línea, el Ministerio de Educación Superior ha decidido crear la Escuela de Hostelería y Turismo, enmarcada dentro de la Universidad Agostinho Neto.
No menos importante es la apuesta del Fondo Soberano Angola para construir una Academia de Gestión de la Hospitalidad de Angola, en Benguela. El proyecto capacitará a técnicos altamente cualificados de hotel.
Este proyecto es resultado de una asociación con dos pretigiosas empresas, Lausana Hospitality Consulting y Ecole Hoteliere de Lausanne, ambas con una consolidada experiencia en el campo de la formación del personal del hotel.
Por otra parte, en 2015 se abrió el año académico formativo de la Escuela de Hostelería y Restauración (EHR), asignada al Ministerio de Administración Pública, Trabajo y Seguridad Social. La EHC ha puesto a disposición 765 vacantes para los cursos de formación inicial y continua.
La oferta es variada en los campos de Hostelería, Restauración y Turismo, técnicos de Agencia de Viajes, entretenimiento de eventos, guía turística, recepción, servicios de visitas, cocina, pastelería y panadería, y restaurante y bar.
Promedio de duración de los cursos es de tres años, dos de formación teórica en los laboratorios de EHR y seis meses de prácticas en una unidad hotelera o de restauración. Los cursos técnicos duran un total de nueve meses, tres meses de formación teórica y práctica en los laboratorios de HME, tres meses de entrenamiento en un ambiente de trabajo real, donde se pagan los alumnos, y otros tres meses de prácticas en hotel y restaurante.
Este año van a ser inaugurados los primeros hoteles de los más de 80 que finalizarán sus obras antes de 2017, en virtud de un acuerdo firmado en 2015 entre Accor, que es la mayor red hotelera del mundo, y la empresa angoleña AAA Activos.
En total, 83 nuevos hoteles, que sumarán 6.344 habitaciones a la oferta de las principales ciudades.
Estos complejos se abrirán en Luanda, Benguela, Sumbe, Lubango y Uíge.
La oferta cubre todos los segmentos del mercado de hoteles de lujo, y también económicos, incluidos los de gama media. Bajo la bandera de Ibis Styles -más barato- se abrirán 27 hoteles, 22 de la marca Mercure y uno de súper lujo: Sofitel.
Con respecto al empleo, que es uno de los ejes estratégicos del plan de desarrollo del sector, cabe destacar que el número de nuevos puestos de trabajo superará los 6.000
A la luz del acuerdo firmado en 2015, durante la visita del presidente francés, Francois Hollande a Angola, AccorHotels también tiene previsto implementar un plan de formación para jóvenes de Angola, para trabajar en áreas que van desde la restauración a la gerencia de hoteles.
Según el acuerdo, Accor gestionará los hoteles, formará a personal angoleño y proporcionará servicios de hospitalidad en todas las unidades, de acuerdo con los estándares internacionales de calidad.
En África, AccorHotels, cuya sede para el continente y el Océano Índico se encuentra en Casablanca (Marruecos) opera en 18 países y tiene más de 10.000 empleados y 94 hoteles, desde el Magreb hasta el sur de África.
En 2014, firmó 12 nuevos contratos, que representan alrededor de dos mil nuevas habitaciones. En 2015 comenzó su expansión a Camerún, República Democrática del Congo y Costa de Marfil.