El consumo de electricidad en Angola se ha incrementado un promedio anual del 16% desde 2008. Para hacer frente a la demanda de energía, que se ha generado principalmente en el norte del país, el Gobierno ha puesto en marcha una estrategia a largo plazo, denominada "Angola 2025", que pretende desarrollar el sector de una forma sostenible y eficaz.
El consumo de energía eléctrica en Angola es esencialmente urbano, con un fuerte impacto en la capital del país y, en menor medida, en el resto de capitales de provincia.
En términos geográficos, este consumo se concentra en el área norte del país (un 77% del total), siendo la capital, Luanda, la ciudad que más electricidad demanda (un 70% de la que se consume en todo el país). Por este motivo, y en determinadas fechas en las que se incrementa el gasto eléctrico, como las Navidades, se llegan a producir cortes de luz.
El consumo doméstico representa el 46% del total, seguido del sector industrial (32%) y del sector servicios (8%). Pero a estos datos de consumo, hay que añadir que el 14% del flujo de energía que se genera en Angola se pierde, debido al actual estado de conservación de la red eléctrica. Otro de los problemas que hay que atajar.
Con el plan "Angola 2025" el Ejecutivo pretende multiplicar por cinco la producción de energía del país. El objetivo es llegar a generar 7,2 GW, suficiente para satisfacer la demanda actual y la que está prevista para los próximos años, teniendo en cuenta el ritmo de crecimiento anual.
Para conseguir esta meta, desde 2013 se viene aplicando un Plan de Acción e Inversión mediante el cual se están construyendo nuevas centrales eléctricas, a la vez que se rehabilitan y amplían el número de turbinas de las ya existentes.
Otro de los pilares de esta estrategia, pasa por implementar una importante refinería de aluminio en Benguela, un proyecto importante que permitiría incluso la exportación de corriente continua (asociada a la industria minera) en el denominado "cinturón de cobre" en Zambia. Este proyecto podría incrementar la producción de energía hasta los 8,8 GW.
La apuesta por la energía hidrocinética (La turbina hidrocinética es un modelo alternativo de generación de energía, que utiliza solamente el caudal de los ríos, sin la necesidad de construir presas) también contribuirá a incrementar la producción nacional.
Para cubrir la demanda nacional será necesario llegar a los 39 tWh en 2025, y no superar el 10% de pérdidas de flujo eléctrico a través de la red.
La tasa de electrificación que consiga Angola dependerá de la capacidad de inversión, pero la experiencia de países con un crecimiento similar es que, la mayoría, han logrado dar cobertura a más del 60% de sus territorios.
En términos de consumo doméstico y servicio por habitante, se estima que habrá un aumento de 1,2 a 1,5 MWH per cápita. Aún así, Angola aún está muy por debajo de los 2,1 MWH per cápita registrados en Sudáfrica en 2009, y de los valores de Estados Unidos o Portugal.
En términos de consumo industrial, hablamos de un área en la que históricamente Angola tiene un rendimiento más bajo que el resto de países similares, debido al impacto del período de la guerra. Siguiendo con el ejemplo de Sudáfrica, la industria representa el 59% del consumo total energético, mientras que en Brasil es un 46%.
La planificación del sistema eléctrico a largo plazo en Angola sólo es posible con una buena distribución territorial a través de la red eléctrica.
Esta distribución dependerá, no sólo de la ubicación de las poblaciones y actividades económicas en cada territorio, sino también de la inversión que se dedique a la expansión de dicha red.
Dado que el porcentaje de la población que tiene acceso a la electricidad es aún pequeño, se necesita una inversión importante para llegar a todas las poblaciones. Distribuir de manera óptima los recursos disponibles pasa por encontrar un equilibrio entre la realidad económica y los criterios territoriales.
De acuerdo con las directrices que marca la estrategia "Angola 2025", ya se ha llevado a cabo un primer ejercicio de planificación de la red desde el punto de vista del consumo a nivel nacional.
En primer lugar, se han identificado todos los lugares habitados, o donde hay proyectos industriales, y se ha generado una base geográfica de la posible evolución y potencial de consumo de toda la población de Angola.
En segundo lugar, a partir de la red existente, se han identificado los lugares que necesitan un punto agregador, donde se pueda instalar una subestación de 60 kV.
Por último, teniendo en cuenta el objetivo de alcanzar el 60% de electrificación, se han estudiado tres modelos alternativos de inversiones prioritarias y electrificación del territorio en 2025.
Para estimar el consumo potencial de la población de Angola se ha tomado datos en más de 22.000 localizaciones del país. Estas estimaciones se ajustan a la base del registro de votantes, y a los resultados preliminares del Censo de Población de 2014.
La estimación de consumo de cada punto se ha calculado mediante la clasificación de los 22.000 sitios en seis categorías de desarrollo económico y densidad de la población, teniendo en cuenta la ubicación de cada zona en los ejes de desarrollo territorial.
También se ha tenido en cuenta el consumo por habitante, y el ritmo de crecimiento de población, que es diferente según la zona, reflejando así mismo la migración de las zonas rurales a las zonas más ricas y densas.
Teniendo en cuenta todas estas variables, todo apunta a que Angola registrará un fuerte aumento del consumo eléctrico, pasando de los 375 kWh por habitante de 2013 a 1.230 kWh por habitante en el año 2025.
En cuanto a los servicios modernos de electricidad, el suministro de forma centralizada, y el aumento de la electrificación los valores pasarán del actual 30%, a un 60% en 2025. Para ese año, habrá registrados 3,7 millones de clientes, más del triple de los que hay en la actualidad.
La fuerte presión del consumo per cápita sólo se podrá gestionar eficazmente si se apuesta por la eficiencia energética, siendo particularmente importante la modernización de los aparatos eléctricos de la población.