Odonto Excellence Angola se encarga de formar a los trabajadores de sus clínicas
Mantener una buena salud bucal es una necesidad vital. Muchas enfermedades y problemas serios de salud pueden prevenirse con una buena higiene y una atención cuidadosa de la salud de la boca. Este es el hilo conductor de un proyecto empresarial que se propone universalizar la salud bucal en Angola, a través de una red nacional de clínicas dentales.
La iniciativa ha partido del grupo Odonto Excellence Angola, que se está expandiendo bajo un modelo de franquicia, con una inversión global de 75 millones de euros. Su objetivo es instalar, en un plazo de dos años, 100 clínicas odontológicas en Angola. El proyecto debe generar 3.400 nuevos empleos directos, a razón de 34 en cada clínica.
Además de la importante función social, la red nacional de clínicas dentales parece ser también un buen negocio, a juzgar por las previsiones indicadas en un estudio que apunta a un beneficio neto del 35% del capital invertido.
Odonto Excellence tiene 432 franquicias en Brasil, Portugal, Paraguay y México. La empresa fue fundada hace siete años por Oseías Gomes, y aterrizó en Angola en 2015. De momento, cuenta con tres clínicas en funcionamiento (todas ellas en Luanda) y está previsto que este mismo verano se inauguren otras 7, que están ya en fase final de instalación.
Angola (con 26 millones de habitantes y en un proceso de crecimiento económico) representa un mercado con gran potencial para el sector de la salud. Se estima que las 100 clínicas que se instalarán abarcarán un mercado de, al menos, 144.000 pacientes.
La inversión mínima necesaria para instalar una franquicia Odonto Excellence, con cuatro salas para el tratamiento odontológico, es de 900.000 euros aproximadamente. Cada sala está proyectada para facturar 80.000 euros al mes de media, por lo que la clínica a pleno rendimiento puede facturar 320.000 euros mensuales.
El inversor interesado en montar una clínica Odonto Excellence no necesita ser dentista. Por ser un sistema de franquicia, la empresa tiene la responsabilidad de montar por completo la clínica, así como preparar al personal, desde el recepcionista a los odontólogos, incluyendo un gerente.
Además, la empresa instala un software que permite al inversor acompañar la gestión del negocio en tiempo real, desde cualquier lugar, a través de Internet. Y el propietario de la franquicia no tiene que preocuparse por el proyecto arquitectónico, ni por la adquisición de consumibles, pues todo está previsto en el contrato, siempre que el 100% de los empleados de las clínicas Odonto Excellence sean nacionales.
En cuanto a las ventajas para los clientes, destaca la posibilidad que la empresa ofrece de financiar el pago del tratamiento dental de forma fraccionada y sin interés. El coste del tratamiento se divide en varias cuotas mensuales, de acuerdo con la capacidad de pago del cliente. Un modelo similar al que ofrecen las clínicas dentales de Europa.
Además de la financiación, otro diferencial ofrecido por Odonto Excellence Angola es una aplicación móvil que permite a los clientes acompañar todas las fases de su tratamiento.
Noé Carlos, inversor de una de las nuevas clínicas de Odonto Excellence, en Zango (Luanda), con los dueños de la franquicia Oseías Gomes y William Franco durante la inauguración el pasado mes de mayo
La caída del precio del barril de petróleo en el mercado internacional ha tenido un fuerte impacto en la economía angoleña, abriendo el debate sobre la necesidad de la diversificación económica y la ampliación del sector de bienes y servicios.
Para promover la actividad de los emprendedores que se lanzan a poner en marcha nuevos proyectos, el Gobierno ha aprobado una serie de estímulos orientados hacia las iniciativas privadas. Un camino difícil de recorrer, debido a la inexistencia de cultura de negocio en Angola. Pero ahora hay más opciones para empezar la vida empresarial, y comprar una franquicia es una de ellas. Garantiza menos riesgo y es viable para quienes no tienen experiencia o habilidad para invertir.
La franquicia es la licencia de una marca que concede el derecho de uso del nombre, patente, infraestructura, experiencia y distribución de productos o servicios. Quien adquiere la franquicia, paga parte de los ingresos al propietario de la marca en forma de "royalties". Además, el titular de la marca proporciona toda su experiencia, los medios de producción necesarios y las prácticas de gestión.
Aunque invertir en una franquicia puede tener un coste inicial elevado, una de las ventajas que presenta es la optimización de los canales de distribución y de representación comercial. Para el franquiciado, el sistema reduce los riesgos de inversión, ya que el producto o servicio ya ha sido experimentado con éxito y es conocido en el mercado.
Entre los países de la CPLP (Comunidad de Países de Lengua Portuguesa), Brasil es el gran ejemplo de éxito de este modelo. Desde 2013, el sector crece a un ritmo del 11% y alcanza ingresos de más de 61.500 millones de euros.
El acompañamiento constante y la interrelación entre las partes involucradas en esta forma de hacer negocios es una manera de invertir que puede ajustarse a la realidad angoleña. La connotación "paternalista" aquí existente es una plusvalía para cualquier nuevo empresario sin conocimiento y experiencia. Y todo apunta a que el modelo puede consolidarse con éxito en Angola.
